Caminando a través del dolor
Nuestras vidas son los ríos que van a dar al mar, que es el morir. Jorge Manrique Seguramente habrás llegado hasta aquí a través del dolor, siguiendo el rastro del inagotable anhelo que reclama tu felicidad. Y en este vaivén de lo deseado y, a menudo inalcanzable, has ido debatiéndote. El dolor te ayudó y te sigue ayudando a crecer al mostrarte todo aquello que aún se mantiene en desequilibrio en tu historia, invitándote a detenerte, a descubrir los nudos en los que te has enredado, los problemas que se repiten una y otra vez y que te impiden ser quien verdaderamente eres: un ser libre, feliz, independiente. Y, sin embargo... ¿Dónde estás? ¿Eres consciente del don extraordinario que es tu vida? ¿Te afanas por encontrar cosas que poseer mientras olvidas en la carrera quién eres? Mira hacia dentro. Siente y escucha tu propia energía, la esencia que te habita. Mientras corres tras todo eso que anhelas, te olvidas de ti, de la vida que eres. Si te dejas a un lado, el vacío va a estar siempre presente en tu historia. Lo de fuera nunca podrá llenarte. Tu vida es tu máximo tesoro. La forma que ahora ocupas, tiene un tiempo limitado. No lo malgastes en pos de un tener en lugar de ser. |
La Vida me está esperando.
Y mientras… yo me retuerzo, dolor tras dolor clavándose en el alma y en el cuerpo. La Vida me está esperando. Y mientras…yo lloro, protesto. ¿Por qué?, le pregunto, ¡qué sola me siento! Y ella sigue ahí, serena y paciente abiertos sus brazos fluyendo en silencio. Sofía Pereira |
Si te olvidas de ti, te desconectas de tu Fuente y, entonces, solo duermes la vida. Vas como un sonámbulo padeciendo situaciones sin la consciencia de ser tú quien las ha creado. Respírate, siéntete, lánzate a la aventura de ahondar en tu ser, de conocerte, de amarte y respetarte incondicionalmente, de darte a manos llenas la amistad y el amor que reclamas de otros. Si dejas tu casa vacía, ¿cómo pueden amarte?